La salsa verde para enchiladas suizas no difiere mucho de la que se prepara para unas enchiladas verdes regulares, pues su receta sólo conlleva un ingrediente extra que le da la cremosidad característica a este platillo.
Como muchas otras comidas (los tacos árabes o la pizza hawaiana, por ejemplo), las enchiladas suizas no tienen nada que ver con el país europeo y son tan mexicanas como el nopal. De hecho, estas enchiladas le deben su fama a uno de los restaurantes emblemáticos de nuestro país: el Sanborns de los Azulejos.
Según la historia, la receta original de las enchiladas suizas viene desde mediados del siglo XIX, cuando al caer el imperio, el mayordomo de la casa de Maximiliano de Habsburgo emigra a la capital del país y trae consigo las recetas con las que alimentaba a la familia real, las enchiladas entre ellas.
El mayordomo aprovecharía sus recetas para abrir un restaurante llamado “Café imperial”, donde nacerían las enchiladas suizas. La historia, sin embargo, se divide en dos versiones a partir de ahí. La primera dice que fue la esposa del mayordomo quien las nombró “enchiladas suizas”, pues nombraba todos los platillos con relación a la casa de Habsburgo.
La segunda versión dicta que fue uno de los hermanos Sanborns el que nombró así las enchiladas porque el queso gratinado le recordaba a la nieve sobre los Alpes suizos. Sin importar cuál sea el origen del nombre, no hay duda de que las enchiladas suizas son uno de los platillos con más tradición en nuestro país.
Para preparar la salsa verde para enchiladas suizas cremosas, los ingredientes que se necesitan son los siguientes:
- 1 kilo de tomate verde
- 5 chiles serranos (si quieres que quede picosita)
- 1/4 de cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 ramita de cilantro fresco
- 1 taza de crema ácida (también se puede usar leche)
- 1/4 de taza de caldo de pollo
El proceso es muy similar a preparar enchiladas verdes, pues tienes que cocer los tomates verdes y los chiles, si es que los añadirás, para después licuar todo junto. Por último, la salsa se fríe con un poquito de aceite a fuego bajo.
Dora un poco tus tortillas, rellénalas con pollo y acomódalas en un refractario, báñalas en la salsa y coloca queso manchego o chihuahua, para finalmente gratinarlas en el horno a 180 grados, por unos 15 minutos y listo, tendrás la salsa para enchiladas suizas casera más deliciosa.