De Kiwilimón para ti

Los 12 platillos más ricos que probamos en 2022

Por Kiwilimón - 2022-12-23T13:35:43Z
En 2022 por fin salimos de casa. Apenas los contagios de COVID 19 disminuyeron, volvimos a los mercados. Nos hicimos un huequito ante la mesa comunal de un tianguis, nos codeamos hombro a hombro en las taquerías, saludamos a los comensales de otra mesa en un restaurante. Quizás viajamos. Quizás nos sentamos a mirar el atardecer en una plaza. Nos volvimos a enamorar del aire libre, de la cercanía y por supuesto, de la cocina de autorías lejanas.El equipo editorial de kiwilimón no fue la excepción. El año que está por irse nos regaló sabores, combinaciones y texturas que se nos anclaron en la mente y el corazón como alfileres en un acerico. Los doce platillos que les presentamos a continuación fueron nuestros favoritos para que, si la nueva oleada nos los permite, ustedes también los disfruten.1. Pulpo al pastor en Arca, Tulum Arca te hará pensar que te perdiste en un oasis en la selva. Sus mesas y sillas en madera rústica y palmeras, muy al estilo Tulum, quizás desvíen la atención de que este es el lugar número 29 de la lista de los LatinAmerican Best Restaurants. Al chef José Luis Hinostroza no le da miedo combinar elementos gourmet con los callejeros, la luz con la sombra, el ying y el yang, para crear combinaciones equilibradas. Ese es el caso del pulpo al pastor: cocinado al dente, con los sabores del achiote y el guajillo y contrastado con pinceladas de puré de lentejas. Por si fuera poco este plato está dispuesto hermosamente para que el ojo tampoco se quede con hambre. Acompáñalo con un mordisco de pan de pulque, un sorbito de un vino natural y, ¡voilá!: tendrás una experiencia completa.2. Palak Paneer y punjabi chole en Curry & Kebab, CDMXAl llegar a este restaurante de cocina de Bangladesh quizás la nariz, antes que los ojos, sepan la verdad: en este lugar se come MUY BIEN. Cada ingrediente, cada sazón están puestos en el momento y técnica correctos. Tanto que los días nublados simplemente se disuelven con la comida del chef Zobor Ali. Así sucede con el palak paneer hecho con espinacas cremosas y el queso indio o con el punjabi chole elaborado a partir de garbanzos bañados en un curry ligeramente picante. Lo mejor es servirse en el plato una montaña de arroz basmati perfumado y luego, montoncitos de palak paneer y punjabi chole orbitando a los lados. Eso sí, esta montaña se conquista mejor con alguno de sus panes que con un triste tenedor. Y así, un bocado a la vez, se vale recobrar el sentido de la vida, la sensación de respirar el presente.3. Seekh Kebab en Mari Gold, CDMX Norma Listman, Saqib Keval y su equipo se han dado a la tarea de construir un pequeño oasis culinario en la CDMX, en donde se fusionan sabores de México y la India para dar paso a platillos complejos y únicos. El mejor ejemplo es el seekh kebab, una mezcla de carne de cordero y res especiados que se acompaña con roti, raita y la estrella del show: un espectacular chutney de tomatillo que tomará a tus papilas gustativas por sorpresa. Esperamos que Mari Gold nos siga contando esta historia de amor entre las tradicionales culinarias de México y la India por muchos años más.4. Tacos castacán en salsa de recado negro en Salón Gallos, MéridaDentro de Salón Gallos, el restaurante, galería, cine y bar a las orillas del centro de Mérida, encontrarás un menú que homenajea la comida fusión yucateco-libanesa y es un absoluto deleite. Sin duda, la joya más preciada de la carta son los tacos de castacán de recado negro, hechos con carne de cerdo en una salsa negra de sabor inimaginable, acompañados con salpicón de vegetales. El complejo tiene una arquitectura bellísima equiparable con sus innumerables actividades culturales, las cuales brillan más de noche y se disfrutan acompañadas de sus delicias culinarias, así como los cocteles de su bar.5. Obi udon de cordero en Fideo Gordo, CDMX Fideo Gordo ha tomado a la ciudad por sorpresa con una propuesta fresca, simple y atrevida en tiempos en los que comer gluten es casi un pecado. El chef Edo Nakatani, heredero de los creadores del famoso cacahuate japonés, nos deleita con increíbles platillos, entre los que destaca el obi udon de cordero, el cual tiene un toque muy mexicano: barbacoa, chile serrano, cebolla y cilantro. Es como si los fideos japoneses y la comida mexicana estuvieran hechos el uno para el otro. Gracias, Edo Nakatani, por iluminarnos con tus sabores.6. Salbute con relleno negro en el Mercado Viejo, Chetumal A partir de las 7 am, este mercado tiene todo lo que necesitas para saciar tu hambre y disfrutar en grande tu recorrido por Quintana Roo. Y aunque las tortas de lechón, de la Taquería Ávila, son tentadoras y deliciosas, tienes que visitar también los comedores públicos y loncherías de este mercado. En cualquier parada que decidas, elige el salbute con relleno negro. ¡Es una joya culinaria mexicana! Incluye todo el sabor yucateco: con su tortillita de maíz frita en manteca de cerdo y una abundante porción de relleno negro, elaborado con pavo, cerdo y una mezcla de chiles que sólo en este rincón de México saben preparar así. ¡Tendrás la proteína y sabor necesarios para seguir viajando!7. Paella mixta tradicional con camarones jumbo en La Mallorquina, CDMXLa Mallorquina es un restaurante español con mucho estilo y platillos imperdibles de la Madre Patria. De entrada, déjate sorprender con una rica tabla de embutidos, una orden de 3 croquetas de jamón de forma casi perfecta o los tacos de rabo de toro que con sólo verlos, te harán agua la boca. Para el fuerte, te recomendamos ir por un clásico que difícilmente pasa de moda: la paella mixta tradicional servida con camarones jumbo perfectamente sazonados e ideal para compartir hasta con 2 personas más. Es todo un agasajo. Seguramente te sugerirán probar la ensalada de la huerta; no dejes pasar la oportunidad pues de sólo de verla, tendrás ganas de quedarte a vivir en ella por siempre. Para acompañar tus platillos, lo mejor será una buena copa de vino de la casa o alguno de los cocteles frescos de su extensa carta. Para cerrar con broche de oro, no dudes en pedir una rebanada de cheesecake acompañada con una bola de helado.8. Campechana caliente en El Changuirongo, Mazatlán En Mazatlán se encuentra este espacio de goce gastronómico. Encuentras su carreta en la calle y en un local muy modesto, súper sabroso, con unas conchitas y mariscos frescos que no tienen igual. Ostiones, almejas y callos de hacha siempre frescos en tu mesa. Si te pides un ceviche, sobre todo el especial, te viene con camarón, pulpo, caracol y pescado inigualable. Sus salsitas para acompañar son una delicia, el lugar aún más y ni qué decir del servicio. Si ya te quieres ir con un sabor inigualable, prueba su Campechana Caliente, coctel bien servido con caldo de camarón, pulpo, callo y almeja en caldo. ¡Lo mejor, en Changuirongo, te atienden y apapachan como si estuvieras en casa o mejor!9. Tarta de queso tatemada en Polpo, CDMX En el conocido pasaje Parían, ubicado en el corazón de la colonia Roma, se encuentra Polpo, un pequeño bar gastronómico que desde hace poco más de un año ofrece una amplia variedad de charcutería, quesos y tapas de corte internacional que se maridan a la perfección con su robusta selección de vinos y cocteles. Si bien la oferta culinaria de este gastrobar es maravillosa, hay un platillo que destaca por sobremanera: el postre. El momento dulce insignia de Polpo es una delicada tarta de queso tatemada con romero que está cubierta por una suave compota de guayaba rosada. Perfecto para disfrutarse por sí sólo o para cerrar con broche de oro cualquier velada.10. Leche de tigre en Limbus Restobar, Cusco El fantástico restaurante con vista panorámica dentro del Barrio de San Blas en Cusco, cuenta también con una amplia gama de platillos de autor entre los que destaca la leche de tigre, un ceviche espectacular hecho con trucha, chullpi, camote, choclo, cebolla, lechuga, chicharrón de trucha y cochayuyo, que conjuga el auténtico sabor de Perú. Lo puedes acompañar con cualquiera de los cocteles especiales en la carta, pero sin duda, el que marca la diferencia y que puedes aprovechar también para darle un giro al clásico pisco sour, es David Jones, un trago especial dentro de un cofre que contiene un corazón de pisco infusionado en Dactylopius Coccus, cordial de limón, kión, zumo de piña, dulce de durazno y fórmula ácida. Si vas a Perú, Limbus Restobar en Cusco es una visita obligada, ¡no te arrepentirás!11. Magret de pato a la miel en Le relais gascon, París Si te encuentras en París, no te pierdas este bistrot cercano a la Iglesia del Sagrado Corazón. En Le relais gascon encuentras el amor verdadero a través de platillos basados en el mejor producto disponible. El término de cocción y la armonía de los sabores contrastados con una buena copa de vino de la casa te hace sentir en casa aun si no eres parisino. Este clásico platillo de la cocina francesa, va bañado en un salsa de miel orgánica que junto con unos ejotes blanqueados y aderezados con aceite de oliva extra virgen enaltecen al máximo el producto. ¿Cómo olvidar lo crocante y suave de las papas que lo acompañan? Su sabor ligeramente dulce te transporta a la campiña. “Las personas que aman lo bueno, aman lo hermoso”, decía el slogan del bistrot. Desde la primera visita encontrarás mucha verdad en cada palabra.12. Omurice de Kichi Kichi, Kioto en CDMX Tras casi dos años de postergación por la pandemia, el famoso chef Motokichi Yukimura trajo su icónico espectáculo desde Japón hasta nuestro país. Durante una semana, el acogedor restaurante Deigo Ramen se convirtió en una extensión del Kichi Kichi en Kioto donde preparó su omuraisu, mejor conocido como omurice. Si bien, el omuraisu es simplemente un omelette de huevo montado sobre una base de arroz frito que se baña con una salsa demi-glace, lo que hace del omurice de Kichi Kichi un platillo espectacular es su peculiar preparación, pues el chef Motokichi lo prepara entre risas, bromas, malabares e incluso mientras baila y canta Kichikichi Happy Omurice. Si tienes oportunidad de viajar a Kioto, Japón, no te puedes perder esta experiencia, pues el omurice de Kichi Kichi es uno de esos platillos que más allá de satisfacer el apetito, alimenta el corazón.