De Kiwilimón para ti

Por qué y para qué hacer détox una vez al año

Por Shadia Asencio - 2022-01-07T12:26:01Z
Existe una realidad: el cuerpo se intoxica. Lo intoxicamos. Los eufemismos nos alcanzan: “No, no es nada”, decimos cuando los órganos comienzan a quejarse. Ignoramos que se comunican a través de sensaciones para que los miremos, para que observemos el foco rojo que nos prenden. Nos lo dice también la piel manchada y opaca. Nos lo anuncia el sueño que se fuga entre episodio y episodio surrealista. Nos lo indica la falta de energía. El inicio de año es quizás la mejor orilla para aventarse a las nuevas aventuras. Hay que comenzar de nuevo. Un cumpleaños, una luna nueva, un lunes: todo sirve. Los puntos de partida nos empoderan para alejarnos de lo tóxico en nuestras vidas –a la pareja desinteresada, a esa perversa muletilla, al amigo que nos quita paz, a los alimentos que nos podrían estar envenenando sin siquiera detenernos a mirar su mal–.  Israel Chirino, experto en trofología, indica que lo ideal es someter al cuerpo a un détox tres veces al año, pero que si no se puede, con una vez está bien. “Las 24 horas del día estamos en contacto con toxinas, ya sea a través de la alimentación, a través de la respiración, a través del contacto con algún cosmético, alguna crema que vaya en la piel”, confirma el también llamado Trofoamigo. Para nuestra experta en nutrición clínica, Jennifer Asencio, es recomendable hacer desintoxicación después de las comilonas de fin de año, pues lo que conseguiremos mediante una restricción es atajar el camino hacia nuestras metas de salud anuales: bajar de peso, liberarnos del colesterol, dejar atrás el hígado graso. La desintoxicación ayuda a liberar las toxinas de aquellos órganos dedicados a eliminar sustancias del cuerpo, por ejemplo, los pulmones, el hígado, los riñones o el colón. Cuando existe en ellos una acumulación de toxinas comienzan también los malestares o, peor aún, las enfermedades. No lo podemos negar. Algunas veces tomamos decisiones incorrectas sobre lo que ponemos sobre el plato. A veces no es a veces, es siempre. Y ponemos carnes procesadas, azúcares en exceso, sal yodada, harinas refinadas o grasas trans que al no poder ser procesadas por el organismo –por su cantidad, por su frecuencia– el organismo deja de asimilarlos y de desecharlos. Esto produce reacciones inmunitarias en nuestro sistema. “Es necesario neutralizarlos para que no nos causen otro tipo de problemas como mutaciones celulares, que a la larga podrían desarrollar tejidos cancerígenos, etcétera”, asevera Israel. Pasa igual en la afinación y el balanceo de los automóviles. Hay que realizar un détox habitualmente para mantener el correcto funcionamiento de los órganos, el metabolismo, la piel, el sueño y mejorar la calidad de vida. La forma de conseguirlo es restablecer la armonía biológica del cuerpo, “se trabaja mucho con el balance ácido-alcalino para lograr una homeostasis. Lo que busca la desintoxicación es recuperar ese equilibrio entre ambos”, afirma Israel. Existen varios tipos de desintoxicación, pero lo que el Trofoamigo recomienda es que sea biocompatible al organismo, que aquello que elijamos sea una fuente de enzimas y nutrientes vivos. Otros métodos incluyen suplementos, pero según sus recomendaciones, hay que elegir lo más natural. No se trata de comer aire. En la viña de la desintoxicación existen alimentos bondadosos, elementales, que nos ayudan a eliminar lo que al cuerpo le sobra. Chirino recomienda lo verde: las lechugas, las acelgas, las espinacas. Recomienda que sean orgánicas, de cultivos locales.Nos pide poner suma atención a la hidratación, porque no toda el agua es buena: para hacerla potable algunas veces se somete a un exceso de cloración que podría dañar los riñones. Lo mejor es el agua ligeramente mineralizada, ionatada y viva. “Actualmente en el mercado existen filtros para lograr este tipo de agua. Existen incluso en versión portátil”, dice. Nos insta a comer ingredientes crudos, o al menos ligeramente cocidos, que todavía se sientan crocantes a la mordida, evitar los alimentos procesados y el alcohol. No disfrazar la comida con aderezos excesivos o demasiada miel, hacer la desintoxicación en plena conciencia. Por su parte, Jennifer Asencio recomienda comenzar con un ayuno de 12 a 16 horas, tomar té verde, pues “ayuda muchísimo a limpiar las vías urinarias, las vías hepáticas y biliares, así como acrecentar la microbiota del intestino. Esto produce cambios en el pH del organismo y mejora las condiciones para que haya más bacterias buenas y benéficas para el intestino”. Adicionalmente, afirma que tomar vinagre de manzana en ayunas mejora la motilidad del intestino y ayuda a limpiar más fácil las vías urinarias y hepáticas. Con un juguito en la mañana el détox no demostrará todas sus bondades. Según lo que nos cuentan los expertos, hay que hacer un tratamiento completo, un cambio de hábitos por algunos días que reinicie el organismo de pé a pá. No estás solo en tus metas de salud. Nuestras nutriólogas de casa elaboraron este reto détox para que empecemos el año de forma más saludable. Lo comenzaremos juntos el 10 de enero y dura diez días, ¿nos acompañas?